Ser multimillonario no es un aval para ser más feliz que el resto de mortales.Un estudio de la Universidad de Princeton (EE UU) corrobora que el dinero mejora la valoración de la vida cotidiana sólo hasta cierto nivel de ingresos.Así, si superamos determinada riqueza no somos necesariamente más felices.
Los científicos analizaron más de 450.000 respuestas de una encuesta a mil estadounidenses y descubrieron que aunque la evaluación de la vida sube de forma constante con los ingresos anuales, la calidad de las experiencias diarias no mejora más allá de unos ingresos superiores a 58.000 euros al año.»He tenido en la consulta a millonarios deprimidos porque ese año han ganado menos comparándose con otros. Muchas personas se lo ponen difícil a la felicidad», explica el psicólogo Bernabé Tierno. Para el especialista, autor de la obra Sabiduría esencial (Temas de hoy), todo se reduce a la actitud que tengas frente a la vida, alejada de «mostrarse inseguro o dejarse llevar por otros», y cercana a «tener ilusión, retos» o estar motivado.
Consejos para ser feliz con menos
Actitud positiva
Y es que esa ansiada sensación «hay que buscarla en nosotros mismos. Porque no está ahí fuera», dice Anna Llauradó, autora junto a Lena Mercadal de Feliz nuevo día(Planeta prácticos). «Algo que tantas veces hemos oído y tan pocas hemos practicado». «Debemos ser capaces de disfrutar de lo que somos y ya tenemos», agrega Mercadal.
Para los expertos esta fórmulano tiene nada que ver con el conformismo, sino con ser «consciente de las pequeñas cosas y disfrutarlas», dice Llauradó, quien cree que vivir las situaciones con prisa no ayuda a la satisfacción personal. Y, además de saber aprovechar el día a día, hay que «crear anclajes afectivos», asegura Tierno. «Estar con los amigos, sentirse integrado, socializarse, enriquecerse de los demás, alejarse de personas tóxicas…», resume.
Aunque el bienestar emocional de cada uno se ve muy sujeto a factores como el temperamento, el estudio de Princeton sugiere, por otra parte, que el dolor que producen episodios tristes, como la enfermedad, una ruptura de pareja o la soledad, se ve exacerbado por la pobreza. «La vida consiste en dedicarse a vivirla incluso con las cosas negativas porque, al final, de todo se aprende», concluye Tierno.
ENTRE-MAIL a Daniel H. Pink, consultor estadounidense: «El amor es lo más importante»
– ¿Qué es la felicidad?
En parte es algo material, porque es difícil ser feliz si no tienes para comer. Pero una vez estás satisfecho, la felicidad consta de hacer lo que te guste, tener relaciones cercanas con los demás y creer en algo más que en uno mismo.
– ¿Necesitamos que otros nos motiven?
La motivación no está en los demás, es algo que uno hace para si mismo.
– ¿Salud, dinero y amor?
De los tres, el amor es lo más importante.
– ¿Hay fórmulas para el crecimiento personal?
Haz lo que te guste porque esto te fortalece y contribuyes al mundo; ten relaciones duraderas y cree que tu vida tiene sentido.